Ciencia vagabunda, un viaje alrededor de las ciencias
The Conversation # 1
The Conversation es un medio digital internacional donde investigadores y universitarios trabajan en conjunto con periodistas profesionales para publicar artículos de divulgación científica. Dada nuestra relación con el Centro de Investigación sobre las Mediaciones (CREM, por sus siglas en francés) de la Universidad de Lorena, Thibaud Sauvageon (cofundador de Ciencia vagabunda) escribe también para este sitio web.
Esta primera crónica explica los retos de nuestro proyecto y lo coloca en su contexto. El texto a continuación es una traducción de su versión original en francés, publicada en abril de 2018 en el sitio The Conversation.
Ciencia vagabunda,
un viaje alrededor de las ciencias
Ésta es la primera crónica de una serie alrededor del proyecto de periodismo digital itinerante Ciencia vagabunda.
¿Hacia una homogeneización de la cultura científica?
Todo científico es un viajero de espíritu.
Ya sea que viaje físicamente o a través de su pantalla, un científico necesita conocer el mundo exterior para recolectar información, analizarla y darla a conocer.
A través de los siglos, el desarrollo tecnológico ha permitido a los investigadores empujar sus fronteras cada vez más lejos. Antaño recluidos en bibliotecas universitarias locales, internet les da ahora acceso al conocimiento científico mundial. Primero automóviles, luego trenes y ahora aviones dan la posibilidad de desplazarse a congresos en cualquier rincón del mundo.
Para comunicarse con investigadores cada vez más alejados físicamente, pero también culturalmente, los científicos recurren frecuentemente al “Globish”, esta versión rudimentaria del inglés utilizado por locutores de cualquier origen. Como lo explica Rainer Enrique Hamel :
“Alrededor del año 2000, 82% de las publicaciones de ciencias sociales y humanidades, y 95% de las publicaciones de las llamadas ciencias naturales se publican en inglés, lengua que figura actualmente como hipercentral”.

Un mundo de diversidad y de especificidades
Estamos en el alba de una nueva era donde la comunicación permite a cada individuo conectarse con el resto del mundo, y sin embargo, nuestras costumbres y estilo de vida siguen siendo tributarios del contexto cultural donde nos desenvolvemos. Observamos el mundo y lo pensamos a través de nuestra cultura. Así pues, la producción de conocimientos científicos -oscilaciones permanentes entre la observación y la reflexión- está íntimamente ligada a la influencia de nuestros códigos culturales. Esta idea es claramente defendida por Thomas S. Kuhn, en La estructura de las revoluciones científicas. De acuerdo con él, las opiniones y decisiones de los científicos dependen de sus creencias, experiencias y visión del mundo.
¿Porqué Japón está a la punta de las innovaciones en robótica ? ¿porqué los cubanos hicieron de las ciencias médicas su especialidad ? ¿cómo explicar la supremacía francesa en el dominio de las matemáticas ?… A lo largo del tiempo las especialidades científicas han encontrado nichos propios en distintos países. Contexto geográfico, organización académica, herencia cultural, estrategia política… Numerosos factores influyen en la orientación científica de cada país.
En un mundo donde la apertura internacional está propulsada por las nuevas tecnologías, ¿qué tan influenciados seguimos estando por nuestra propia cultura?
El viaje como herramienta de comprensión
Responder a esta pregunta, significa observar la manera que se se hacen las ciencias en distintos lugares del mundo. En otras palabras, habría que tomar las ciencias como constante y hacer variar el factor cultural. Ésta es la idea que Mariana Díaz y yo queremos aplicar a través del proyecto Ciencia vagabunda.
Mariana, mi pareja, es periodista. Después de algunas experiencias en medios de Francia y de México (su país de origen), se especializó en el periodismo web y en los nuevos formatos digitales. En cuanto a mí, ingeniero de formación, tuve la oportunidad de conocer el mundo de la investigación científica desde adentro al realizar un doctorado en Ciencias de la madera y de las fibras en la Universidad de Lorena. Nos conocimos en 2011, durante un semestre universitario en Chile. Ambos apasionados por la divulgación científica, la cuestión del lugar que ocupan las ciencias en la sociedad fue un tema que nos unió rápidamente.
Al crear Ciencia vagabunda, decidimos lanzarnos a un viaje por el mundo (que podría durar varios años) para conocer a los distintos actores de la cultura científica en cada país: aquellos que producen el saber científico (los investigadores), aquellos que facilitan su difusión (los divulgadores), y aquellos que se benefician del saber científico (la población en general). De este modo, queremos aportar una mirada a las relaciones entre ciencia y sociedad que existen a lo largo y ancho de nuestro planeta.

Una comunidad alrededor de las ciencias
Para compartir nuestra experiencia, realizaremos reportajes digitales a lo largo del viaje con contenidos multimedia (como videos interactivos y fotos 360º) que serán publicados en nuestro sitio web.
Actualmente estamos en plena realización de nuestro primer reportaje en La Paz, en el noroeste de México. Ahí, una comunidad de pescadores trabaja en estrecha colaboración con una ONG y con científicos para aportar respuestas locales a un problema mundial: la protección de los recursos marinos. Este reportaje pondrá a la luz la manera en que se articulan las relaciones entre el mundo de la pesca tradicional y aquel de la investigación.
Además de compartir nuestro trabajo con la comunidad internacional, queremos hacerlo también a escala local a través de conferencias en escuelas, entrando en contacto con los medios locales, o participando en eventos de divulgación científica. Acercarnos a la población local nos permitirá no sólo transmitir nuestras experiencias, sino también recibir conocimientos e información. ¿De qué manera la población en general percibe a las ciencias?, ¿cuál es la imagen que se tiene del mundo de la investigación?… Estamos seguros de que este tipo de encuentros enriquecerán nuestra aventura.
Observar la divulgación científica en diferentes países nos parece también esencial. Gracias a los viajes podremos descubrir nuevas formas de compartir el conocimiento científico. Por ello queremos aprovechar nuestra condición de itinerantes para servir de vínculo entre divulgadores de diversos horizontes… y ¿porqué no?, ¡volvernos catalizadores de ideas y de encuentros!
Al igual que las ciencias, los viajes conllevan una dosis de sorpresas y de giros inesperados. Mis próximas crónicas me permitirán pues, compartir con ustedes nuestras impresiones y reflexiones en tanto que divulgadores de ciencia y viajeros.
Mientras tanto, estamos abiertos a sus comentarios, preguntas y sugerencias. Nuestro itinerario provisional es bastante flexible, ¡no duden en transmitirnos sus contactos con científicos en el extranjero! Encuentra más información en nuestro sitio y ¡sigue nuestros primeros pasos en este viaje alrededor de las ciencias!
Thibaud Sauvageon, Reportero independiente, cofundador de Ciencia vagabunda e investigador asociado en el laboratorio del CREM, Universidad de Lorena
Traducción: Mariana Díaz
Ciencia vagabunda,
un viaje alrededor
de las ciencias
The Conversation # 1
The Conversation es un medio digital internacional donde investigadores y universitarios trabajan en conjunto con periodistas profesionales para publicar artículos de divulgación científica. Dada nuestra relación con el Centro de Investigación sobre las Mediaciones (CREM, por sus siglas en francés) de la Universidad de Lorena, Thibaud Sauvageon (cofundador de Ciencia vagabunda) escribe también para este sitio web.
Esta primera crónica explica los retos de nuestro proyecto y lo coloca en su contexto. El texto a continuación es una traducción de su versión original en francés, publicada en abril de 2018 en el sitio The Conversation.
Ciencia vagabunda,
un viaje alrededor
de las ciencias
Thibaud Sauvageon y Mariana Díaz, cofundadores de Ciencia vagabunda.
Ésta es la primera crónica de una serie alrededor del proyecto de periodismo digital itinerante Ciencia vagabunda.
¿Hacia una homogeneización de la cultura científica?
Todo científico es un viajero de espíritu.
Ya sea que viaje físicamente o a través de su pantalla, un científico necesita conocer el mundo exterior para recolectar información, analizarla y darla a conocer.
A través de los siglos, el desarrollo tecnológico ha permitido a los investigadores empujar sus fronteras cada vez más lejos. Antaño recluidos en bibliotecas universitarias locales, internet les da ahora acceso al conocimiento científico mundial. Primero automóviles, luego trenes y ahora aviones dan la posibilidad de desplazarse a congresos en cualquier rincón del mundo.
Para comunicarse con investigadores cada vez más alejados físicamente, pero también culturalmente, los científicos recurren frecuentemente al “Globish”, esta versión rudimentaria del inglés utilizado por locutores de cualquier origen. Como lo explica Rainer Enrique Hamel :
“Alrededor del año 2000, 82% de las publicaciones de ciencias sociales y humanidades, y 95% de las publicaciones de las llamadas ciencias naturales se publican en inglés, lengua que figura actualmente como hipercentral”.

Grabado en madera de Flammarion, “La atmósfera: meteorología popular”, por Camille Flammarion (1888).
Un mundo de diversidad y de especificidades
Estamos en el alba de una nueva era donde la comunicación permite a cada individuo conectarse con el resto del mundo, y sin embargo, nuestras costumbres y estilo de vida siguen siendo tributarios del contexto cultural donde nos desenvolvemos. Observamos el mundo y lo pensamos a través de nuestra cultura. Así pues, la producción de conocimientos científicos -oscilaciones permanentes entre la observación y la reflexión- está íntimamente ligada a la influencia de nuestros códigos culturales. Esta idea es claramente defendida por Thomas S. Kuhn, en La estructura de las revoluciones científicas. De acuerdo con él, las opiniones y decisiones de los científicos dependen de sus creencias, experiencias y visión del mundo.
¿Porqué Japón está a la punta de las innovaciones en robótica ? ¿porqué los cubanos hicieron de las ciencias médicas su especialidad ? ¿cómo explicar la supremacía francesa en el dominio de las matemáticas ?… A lo largo del tiempo las especialidades científicas han encontrado nichos propios en distintos países. Contexto geográfico, organización académica, herencia cultural, estrategia política… Numerosos factores influyen en la orientación científica de cada país.
En un mundo donde la apertura internacional está propulsada por las nuevas tecnologías, ¿qué tan influenciados seguimos estando por nuestra propia cultura?
El viaje como herramienta de comprensión
Responder a esta pregunta, significa observar la manera que se se hacen las ciencias en distintos lugares del mundo. En otras palabras, habría que tomar las ciencias como constante y hacer variar el factor cultural. Ésta es la idea que Mariana Díaz y yo queremos aplicar a través del proyecto Ciencia vagabunda.
Mariana, mi pareja, es periodista. Después de algunas experiencias en medios de Francia y de México (su país de origen), se especializó en el periodismo web y en los nuevos formatos digitales. En cuanto a mí, ingeniero de formación, tuve la oportunidad de conocer el mundo de la investigación científica desde adentro al realizar un doctorado en Ciencias de la madera y de las fibras en la Universidad de Lorena. Nos conocimos en 2011, durante un semestre universitario en Chile. Ambos apasionados por la divulgación científica, la cuestión del lugar que ocupan las ciencias en la sociedad fue un tema que nos unió rápidamente.
Al crear Ciencia vagabunda, decidimos lanzarnos a un viaje por el mundo (que podría durar varios años) para conocer a los distintos actores de la cultura científica en cada país: aquellos que producen el saber científico (los investigadores), aquellos que facilitan su difusión (los divulgadores), y aquellos que se benefician del saber científico (la población en general). De este modo, queremos aportar una mirada a las relaciones entre ciencia y sociedad que existen a lo largo y ancho de nuestro planeta.

Itinerario previsto para el viaje de Ciencia vagabunda.
Una comunidad alrededor de las ciencias
Para compartir nuestra experiencia, realizaremos reportajes digitales a lo largo del viaje con contenidos multimedia (como videos interactivos y fotos 360º) que serán publicados en nuestro sitio web.
Actualmente estamos en plena realización de nuestro primer reportaje en La Paz, en el noroeste de México. Ahí, una comunidad de pescadores trabaja en estrecha colaboración con una ONG y con científicos para aportar respuestas locales a un problema mundial: la protección de los recursos marinos. Este reportaje pondrá a la luz la manera en que se articulan las relaciones entre el mundo de la pesca tradicional y aquel de la investigación.
Además de compartir nuestro trabajo con la comunidad internacional, queremos hacerlo también a escala local a través de conferencias en escuelas, entrando en contacto con los medios locales, o participando en eventos de divulgación científica. Acercarnos a la población local nos permitirá no sólo transmitir nuestras experiencias, sino también recibir conocimientos e información. ¿De qué manera la población en general percibe a las ciencias?, ¿cuál es la imagen que se tiene del mundo de la investigación?… Estamos seguros de que este tipo de encuentros enriquecerán nuestra aventura.
Observar la divulgación científica en diferentes países nos parece también esencial. Gracias a los viajes podremos descubrir nuevas formas de compartir el conocimiento científico. Por ello queremos aprovechar nuestra condición de itinerantes para servir de vínculo entre divulgadores de diversos horizontes… y ¿porqué no?, ¡volvernos catalizadores de ideas y de encuentros!
Al igual que las ciencias, los viajes conllevan una dosis de sorpresas y de giros inesperados. Mis próximas crónicas me permitirán pues, compartir con ustedes nuestras impresiones y reflexiones en tanto que divulgadores de ciencia y viajeros.
Mientras tanto, estamos abiertos a sus comentarios, preguntas y sugerencias. Nuestro itinerario provisional es bastante flexible, ¡no duden en transmitirnos sus contactos con científicos en el extranjero! Encuentra más información en nuestro sitio y ¡sigue nuestros primeros pasos en este viaje alrededor de las ciencias!
Grabaciones del primer reportaje en La Paz, México.
Thibaud Sauvageon, Reportero independiente, cofundador de Ciencia vagabunda e investigador asociado en el laboratorio del CREM, Universidad de Lorena
Traducción: Mariana Díaz
5 agosto, 2018 @ 04:23
Mariana y Thib!!! me encantó el documental de Pascal y disfruté muchisimo el making of de 2 meses de viajeros!
La calidad y claridad de los reportajes me encanta y las líneas de investigación de Pascal me resultaron fascinantes!
Ya estoy esperando los siguientes reportajes!!
Felicidades!
9 enero, 2020 @ 10:46
Buenísimo el post. Reciba un cordial saludo.